Clavos
Cómo preparar Jamón Glaseado con Miel
El jamón glaseado con miel está delicioso. Es una receta muy especial, que puede servir perfectamente para una celebración o para sorprender a tus invitados, aunque cada vez son más las personas que lo incorporan a su menú mensual. Queda jugoso por dentro y crujiente por fuera. ¡Exquisito!
Para hacer un riquísimo jamón glaseado con miel, lo primero que debemos hacer es atar el jamón. Lo metemos en una cacerola grande, con agua, y le añadimos la zanahoria y el apio ya limpios y cortados en trozos, además de las especias.
Dejamos que el jamón cueza el tiempo necesario. Después, lo sacamos y lo dejamos enfriar mientras hacemos una salsa con las verduras de la cocción, una vez hemos sacado los clavos y la pimienta negra.
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Lomo de Orza
Quitamos la cuerda al jamón y hacemos un corte a la piel en forma de rombo, con cuidado de no cortar la carne. Frotamos con sal el jamón y reservamos.
Para hacer el glaseado ponemos en una cacerola la mostaza, la miel, el licor y el azúcar, todo a fuego lento y removiéndolo hasta que la mezcla espese.
A continuación ponemos el jamón en una bandeja de horno y echamos parte del glaseado que hemos preparado por encima, hasta que cubra al jamón.
Ponemos a precalentar el horno a 250º C, con calor por arriba y por abajo. Cuando esté caliente metemos el jamón y lo vamos sacando cada diez minutos para echar por encima un poco del glaseado, y así durante media hora aproximadamente o hasta que veamos que el jamón está dorado por todos los lados
Para hacer el glaseado ponemos en una cacerola la mostaza, la miel, el licor y el azúcar, todo a fuego lento y removiéndolo hasta que la mezcla espese.
A continuación ponemos el jamón en una bandeja de horno y echamos parte del glaseado que hemos preparado por encima, hasta que cubra al jamón.
Ponemos a precalentar el horno a 250º C, con calor por arriba y por abajo. Cuando esté caliente metemos el jamón y lo vamos sacando cada diez minutos para echar por encima un poco del glaseado, y así durante media hora aproximadamente o hasta que veamos que el jamón está dorado por todos los lados. ¡Delicioso!