- Una capa blanca y gruesa: esto puede indicar una acumulación de toxinas, a menudo relacionada con una digestión lenta o un estilo de vida desequilibrado (sí, también estamos hablando de los bocadillos nocturnos).
- ¿Amarillo limón? A menudo asociado con el calor interno, este signo a veces refleja un hígado sobrecargado o emociones fuertes, como la ira contenida.
- Rojo intenso: Una lengua muy roja puede indicar inflamación interna o estrés persistente . Tu cuerpo, en plena actividad, podría estar pidiendo un merecido descanso.
- Palidez excesiva: Una lengua muy pálida suele indicar fatiga significativa o deficiencias, sobre todo de hierro o vitaminas. El cuerpo te susurra: «Necesito un empujón».
Formas, marcas, texturas: los detalles que importan
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